domingo, 30 de marzo de 2008

Nostalgia de qué...ya da igual...

Desgarrándome la voz en cada grito, aprovecho el viento que va en la misma dirección que el sonido que desprende mi boca, y aún así no vale la pena, por mucho que alces la voz si los oídos de la otra persona no quieren escuchar solo albergarán silencio.¿Y por qué no decirlo?, me siento triste y sin ganas, sin ganas de intentar de nuevo subirme a la torre más alta para llegar hasta ti...Rosas marchitas ese es el recuerdo que guardo, rosas que en su tiempo tuvieron una belleza inmensa y que ahora están secas en mi memoria. Y aún afirmo amigo mio, que siempre estaré ahí por si una piedra demasiado grande cae en tu camino.

lunes, 10 de marzo de 2008

¡Buenas noches día, Buenos días noche!

Ando buscando una magia, llevo días levantando las piedras, abriendo cajones, mirando en todos los rincones, y nada, no la encuentro...pero tonta de mí, es tan sencillo!!Solo tengo que cerrar los ojos e inventarme un cuento para ti, para que te guste y para que te rías, para mí también, pero menos, solo necesito que estés bien y ver como esa hilera de dientes mira la vida sonriendo en el centro de tu cara.

Esta vez no diré que eres especial, simplemente eres necesaria para mí, hablar contigo observando como se muere el día, viendo como los tonos de luz van cambiando y me quedo completamente a oscuras mientras ya nos decimos buenas noches, y después de colgarte aún pienso en ti sonriendo, te imagino colgando el móvil y dejándolo en cualquier parte mientras reanudas tu estudio o vas a la cocina a por un vaso de agua, y después incluso susurro:¡Que suerte tengo!

¿Te acuerdas de aquella luna?¿De dos personas tiradas en la arena, mirando al cielo sin hablar?Hasta ahí llegaría contigo, no más, y me encantaría ver una estrella caer del cielo y regalarte mi deseo, para que fuese tuyo y ya no decir nada más... o tal vez si, un beso, pero en la punta de la nariz...Te quiero tanto...nunca se acabaran mis te quieros para ti.

jueves, 6 de marzo de 2008

Primavera que no llega


Este repentino frío retrasa mi esperada primavera, este viento tan fuerte me ha arrastrado a calles que desconozco, la nariz roja de frío, la caracterización de un payaso, de eso que soy, un payaso muerto de frío y perdido en algún lugar. Estos dedos congelados me impiden llevar las riendas y mi única salvación es la primavera, esa primavera que aún no quiere llegar.


No, hoy no quiero volar contigo...